domingo, 24 de febrero de 2013

Preludio. Dejadme!

Gente, por favor, piedad. Piedad para mí, por favor.

Dejadme vivir. Dejadme vivir en paz, imploro. 
Dejadme vivir a solas con ellas. 
No me pidan que abandone a una o a la otra como tampoco a la otra. 
Sería imposible para mí vivir sin ellas.

Las amo. Yo mismo las forjé. Las hice. 
Paso a paso, segundo a segundo, minuto a minuto durante muchos y largos años. 
Así, por favor, no pidan que me separe de ellas, mucho menos que las abandone. 
Son mis compañeras desde que amanezco hasta que vuelvo a amanecer.

Dejadme vivir, gente, con mi locura, con mi soledad, con mi fortuna.

Son todo y lo único que realmente tengo.

Dejadme vivir con ellas, en paz. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario